domingo, 27 de marzo de 2011

Quemando Plata - Ricardo Piglia




"Luego en un momento dado se supo que los delincuentes estaban quemando cinco millones de pesos que les quedaban del atraco a la Municipalidad de San Fernando, de donde, como es sabido, se llevaron siete millones".



"Empezaron a tirar billetes de mil encendidos por la ventana. Desde la banderola de la cocina lograban que la plata quemada volara sobre la esquina. Parecían mariposas de luz, los billetes encendidos. Un murmullo de indignación hizo rugir a la multitud:
- La queman.
- Están quemando la plata.
Si la plata es lo único que justificaba las muertes y si lo que han hecho, lo han hecho por plata y ahora la queman, quiere decir que no tienen moral, ni motivos, que actúan y matan gratuitamente, por el gusto del mal, por pura maldad, son asesinos de nacimiento, criminales insensibles, inhumanos"


"Indignados, los ciudadanos que observaban la escena daban gritos de horror y de odio, como en un aquelarre del medioevo (según los diarios), que no podían soportar que ante sus ojos se quemaran cerca de quinientos mil dólares en una operación que paralizó de horror a la ciudad y al país y que duro exactamente quince interminables minutos, que es el tiempo que tarda en quemarse esa cantidad astronómica de dinero..."

No hay comentarios: